FIV, chip con la historia del paciente o células madre, desarrollos científico del Siglo XXI

La fecundación "in vitro" (FIV), la colocación bajo la piel de un chip o tarjeta que acumule la historia clínica del paciente, la medicina individualizada o la regeneración de tejidos con el uso de células madre, son algunos de los desarrollos científicos que revolucionarán la medicina del siglo XXI.

Así se pone de manifiesto en el libro "La Medicina del futuro", editado por el Grupo Valenciano del Capítulo Español del Club de Roma, que incluye una recopilación de artículos de una veintena de destacados especialistas en medicina regenerativa y reproductiva, oncología, cardiología o trasplantes.
Los premios Rey Jaime I Rafael Carmena, Rafael Matesanz, Ciril Rozman y Justo García de Yébenes; así como José Mir, Carlos Simón, Antonio Pellicer, Rubén Moreno, Carlos Guillem, Emilio Barberá o Juan Martínez León, entre otros, aportan textos con el objetivo de dar una visión humanística sobre la medicina del futuro.
La edición, presentada esta tarde, se vertebra en torno a la medicina asistencial, medicina interna, regenerativa y reproductora, y también incluye los avances en la oncología o en las prácticas ligadas a la reproducción humana asistida.
Para el Club de Roma, que ha editado el libro en colaboración con el Hospital La Ribera, la medicina es una "revolución silenciosa que debe estar presente en todo el planeta, impidiendo que se produzcan una brecha social en la humanidad".
En el libro, el director del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI), Antonio Pellicer, señala que las sociedades "evolucionan al igual que las demandas sociales", y destaca que la esterilidad no se consideró un problema hasta 1978, momento en el que surgieron los primeros niños probeta.
En la actualidad, entre el tres y el cinco por ciento de los niños que nacen cada año lo hacen gracias a las técnicas de reproducción asistida, según Pellicer, quien ha agregado que en un futuro las mujeres se plantearán la congelación de óvulos con el fin de posponer la maternidad y desarrollarse profesionalmente.
El director de la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados, Emilio Barberá, destaca como una innovación en el tratamiento el tipaje genético de un paciente, acumulando su historia clínica en un chip o tarjeta, que se insertaría bajo la piel y permitiría al facultativo su consulta de modo directo.
Por su parte, el jefe de Servicio de Dermatología del Instituto Valenciano de Oncología (IVO), Carlos Guillem, hace referencia al factor sociológico por el cual se percibe el bronceado como un factor de belleza pero que incrementa la aparición del cáncer de piel.
"No existe la misma conciencia social de la importancia de evitar la exposición al sol, como existe con la lucha contra el tabaquismo", ha señalado Guillem.
El director general del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) de Valencia, Rubén Moreno, asegura que la utilización de las células madre representa "tanto un reto como una oportunidad en lo que se denomina medicina regenerativa".
En el libro, también destaca que se camina hacia la llamada "medicina individualizada", una "revolución" basada en prescribir en función del fenotipo -de las características genéticas del individuo- que traerá consigo diagnósticos más precisos.
También optimizará las estrategias terapéuticas, ajustando los fármacos, evitando, no solo los efectos adversos indeseados, sino los costes asistenciales indeseados, y evitando de forma precoz nuevas enfermedades.